La subida de la tarifa de la luz que estamos experimentando está siendo cuanto menos, desorbitada. A todos nos está afectando el hecho de que aumente progresivamente y nadie escapa ante tal subida. Las empresas se han visto también seriamente afectadas por este hecho y, las pymes catalanas no han dudado en afirmar que está suponiendo un grave riesgo para los trabajadores.
Se están solicitando medidas fiscales
Pimec ha dado la voz de alarma ante el alza desbocada del precio de la energía y por ello, hasta 320.000 empleos de pequeñas y medianas empresas de Cataluña corren peligro a causa de los costes de la electricidad, del gas y de los carburantes. Esos son los datos que se recogen en una encuesta que se ha elaborado por parte de la patronal en febrero antes del inicio de la ya conocida crisis en Ucrania.
El presidente de la entidad, Antoni Cañete, ha señalado otro dato negativo. Todo se debe a que un 16,4% de las pymes consideran que la continuidad de la actividad no está garantizada por el hecho de que el coste energético ha aumentado considerablemente. Por otro lado, otro 45,6% de encuestados, piensa que el factor afecta de manera preocupante a la viabilidad de las compañías. Por esta razón, Pimec ha reclamado por carta a la presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von Der Leyen que el gas salga inmediatamente del mercado mayorista para así conseguir una disminución del precio.
Además de todo ello, la patronal también ha instado al gobierno a intervenir en el sistema de fijación de precios marginalistas de la electricidad. Es importante destacar, que las compañías ofertan en cantidades electricidad hasta cubrir la demanda horaria que existe en cada momento y todas las cantidades se pagan al precio que se ha ofertado por la última cantidad que cubre la demanda, o sea, el precio más elevado.
La entidad también solicita al ejecutivo central de la Generalitat Catalana la adopción de medidas fiscales que den aire a las empresas. Durante la presentación del informe, Antonio Cañete ha apuntado a las compañías energéticas, a las que acusa de obtener unos beneficios excesivos que no se corresponden con el precio real del producto y que cifra en más de 76.000 millones de euros al año.
Hay que destacar también la inflación
El aumento de los costes de la energía provoca además de todo ello, que la mayoría de las pymes lo estoy trasladando a los precios de los productos. En concreto, hasta tres de cada cuatro ya están en proceso de incrementarlos. La factura energética se une a las dificultades que un gran número de pymes llevan arrastrando desde hace dos años a consecuencia de la pandemia. El pasado mes de enero, durante la sexta ola de la crisis sanitaria, una de cada tres había tenido que cesar la actividad de manera total o parcial por las bajas laborales que había causado el coronavirus, según reveló otro informe diferente de Pimec.